Virgen del Carmen

Virgen del Carmen
Protege a Chile

jueves, 30 de octubre de 2008

Basta de mentiras

Los salvadores presos, los otros a la vera de la teta Estatal

Basta de mentiras.

Una frase atribuida a Francisco de Quevedo nos advierte que “Donde no hay justicia es peligroso tener razón, ya que los imbéciles son mayoría”, lo que sin duda es algo tremendamente razonable, pues la falta de probidad justiciera pone en serios riegos la libertad y la independencia de las personas.

La imbecilidad, enfermedad congénita de muchos ciudadanos del mundo, se ve agravada por la ignorancia inducida que algunos han provocado en las masas con el objetivo de manipularlas en su beneficio y/o ensalzar sistemas que les permitan hacerse con el poder total.

Por indolencia, imbecilidad, o por simple ignorancia hemos aceptado como cierto que en el Gobierno Militar se persiguió sistemáticamente, y se les exterminó, a quienes se oponían a esa administración que fue pedida por la mayoría del pueblo para evitar una catástrofe de proporciones inmensas.

Por malicia, engaño y cierta dosis de ignorancia hemos aceptado que los actuales Gobernantes se “vistan” con los éxitos del sistema instalado por el Gobierno de las Fuerzas Armadas y de Orden, olvidándonos, tal vez sin mala intención, que la UP dejo al país destrozado y en la ruina.

Por comodidad, dejación o por preocuparnos solo de nuestros asuntos personales hemos permitido que una pandilla cercana al Gobierno desangre la Caja Fiscal y que como justificación de persiga sin misericordia a aquellos que dejaron su tranquilidad para velar por nuestra seguridad.

Por cobardía moral, por miedo a enfrentar a las “verdades oficiales”, o por simple estupidez hemos tolerado que un grupos de audaces se atribuya la recuperación de la democracia en circunstancias que todos sabemos que el itinerario y los plazos estaban prescritos por la Constitución.

Por egoísmo, individualismo exacerbado o por molicie soportamos a una pandilla de incapaces, ineptos y corruptos que se han elevado al poder poniendo sus pies sobre el dolor del pueblo y pisoteando las esperanzas que ellos mismos hicieron abrigar en las almas de los más humildes.

La gravedad de todas estas situaciones que hemos permitido desaprensivamente está en que no hemos pensado que aquellas injusticias que hoy afectan a algunos de nuestros conciudadanos, mas temprano que tarde se volverán contra el resto, pues la mentalidad totalitaria les lleva a intentar conculcar nuestros derechos.

Pero, cuidado, cuando nuestros derechos se vean afectados es perfectamente posible que no haya nadie que pueda hacer algo por defendernos, que nadie tenga interés en hacerlo después de constatar el abandono en que dejamos a los otros o que simplemente no exista la posibilidad de protección alguna.


os países que tratan de vivir sin valores

terminan por desvalorizar la vida de sus ciudadanos.
Promocione esta página

Notas anteriores

Datos personales

Mi foto
Los pueblos que no se defienden seguramente pierden sus libertades. http://reaccionchilena.blogspot.com/

Snap Shots

Get Free Shots from Snap.com