Virgen del Carmen

Virgen del Carmen
Protege a Chile

jueves, 3 de abril de 2008

Necesitamos más personas como Jaime Guzmán

Necesitamos más personas como Jaime Guzmán
Jaime Bellolio


Este año se cumplen diecisiete desde que Jaime Guzmán fuese cobardemente asesinado; yo no lo conocí y apenas tenía diez años cuando esto pasó. ¿Tendría, entonces, algún sentido para alguien de mi generación preocuparse por lo que pudo haber dicho alguien “tan añejo” (como sostienen los supuestos progresistas)? ¿Es que acaso los grandes hombres están pasados de moda y ya no hacen falta?

La situación que está viviendo el país —y en particular la política— hace que hoy más que nunca sea vigente su testimonio. En mi opinión, por dos razones fundamentales.

La primera es la constante preocupación que tuvo por promover, alentar e involucrar a miles de jóvenes en el servicio público. Ello hace posible conservar, casi invariablemente, los pilares de una organización y, además, permite tener una especie de seguro para la sociedad, garantizando que quienes lleguen a los lugares de poder no se aferrarán a ellos como su tesoro más preciado, sino que lo verán como un medio pasajero e importantísimo para lograr el bien común. En definitiva, quien decida dedicar su vida al servicio público, siempre lo hará pensando en el bien que ello le reporta a la sociedad y no en su bienestar personal.

La segunda es la disposición permanente a no abdicar en los principios y valores, incluso cuando fuera lo más conveniente en alguna situación en particular o para resolver algún problema. De lo contrario, se cumpliría el famoso dicho: “quien no vive como piensa, termina pensando como vive”.

Hay quienes sostienen que hoy los jóvenes no están preocupados del servicio público o de la política, porque se habrían acabado los grandes sueños o los grandes conflictos. Sin embargo, creo que esta apatía y desencanto existe por la falta de líderes a las cuales admirar.

Hoy más que nunca necesitamos servidores públicos de excelencia, dispuestos a trabajar sin descanso por los demás. En tiempos donde situaciones de corrupción, ineficacia, desórdenes y mal uso de fondos públicos ya no sorprenden a nadie, no se requiere más de lo mismo, se necesitan cambios profundos. Como decía Albert Einstein, la locura humana más grande consiste en seguir haciendo lo mismo y esperar resultados distintos.

Y la paradoja es que para cambiar se necesitan algunas cosas del pasado, volver a las raíces, sin perder la modernidad. En fin, necesitamos más personas como Jaime Guzmán.


Los países que tratan de vivir sin valores terminan por desvalorizar la vida de sus ciudadanos.

No hay comentarios:

Promocione esta página

Notas anteriores

Datos personales

Mi foto
Los pueblos que no se defienden seguramente pierden sus libertades. http://reaccionchilena.blogspot.com/

Snap Shots

Get Free Shots from Snap.com