Sin duda el episodio Provoste puede ser mirado desde ópticas distintas, si se mira desde la vereda oficialista se ve una derrota absurda y una advertencia, seria por cierto, de que el Parlamento se está aburriendo de ser solo la comparsa que necesita el Ejecutivo para mostrar una presunta democracia.
Desde la otra senda, la visión no puede ser la de una victoria, porque nadie pretende desestabilizar a la administración, pero sí se ve una señal clara para los corruptos de que se “acabó” la fiesta, pero es además una notificación de que el país quiere que paguen las jefaturas y no los ratones.
Creemos que como todas las cosas malas, ésta difícil situación para la administración se puede transformar fácilmente en una oportunidad para demostrar que desde el Ejecutivo se cambiará el “switch” y se comenzará “con celo” a cautelar los intereses fiscales, los dineros del pueblo.
Hasta ahora la política ha presentado características muy curiosas, un gobierno sin oposición que descalifica permanentemente a sus adversarios tildándolos de obstruccionistas, mientras los “otros” achanchados simplemente no hacían nada por provocar el necesario cambio.
Creemos que es hora de la verdadera confrontación de las ideas, ante el pueblo, con el compromiso de cumplir con los proyectos ofrecidos y la obligación de legislar sancionando a aquellos que prometan y no cumplan. La demagogia debe ser desterrada de este país.
Los países que tratan de vivir sin valores terminan por desvalorizar la vida de sus ciudadanos.
Desde la otra senda, la visión no puede ser la de una victoria, porque nadie pretende desestabilizar a la administración, pero sí se ve una señal clara para los corruptos de que se “acabó” la fiesta, pero es además una notificación de que el país quiere que paguen las jefaturas y no los ratones.
Creemos que como todas las cosas malas, ésta difícil situación para la administración se puede transformar fácilmente en una oportunidad para demostrar que desde el Ejecutivo se cambiará el “switch” y se comenzará “con celo” a cautelar los intereses fiscales, los dineros del pueblo.
Hasta ahora la política ha presentado características muy curiosas, un gobierno sin oposición que descalifica permanentemente a sus adversarios tildándolos de obstruccionistas, mientras los “otros” achanchados simplemente no hacían nada por provocar el necesario cambio.
Creemos que es hora de la verdadera confrontación de las ideas, ante el pueblo, con el compromiso de cumplir con los proyectos ofrecidos y la obligación de legislar sancionando a aquellos que prometan y no cumplan. La demagogia debe ser desterrada de este país.
Los países que tratan de vivir sin valores terminan por desvalorizar la vida de sus ciudadanos.
2 comentarios:
Hemos visto muchas cosas en política.Pero quiero hacer una cronología de hechos respecto de la suspendida ministra Provoste que nos hablan de lo chabacanos que están los asesores comunicacionales en politica:
1º Se dijo que por ser mujer se iba a cometer femicidio político..
2º Se dijo que por ser de origen humilde se articulaba contra ella.
3º Se dijo que por ser de origen diaguita se discriminaba racistamente el tema.
4º Ahora se prepara como Mártir en la congregación de la Orden de la Madre de Dios. ¿de que estamos hablando?
El ex Presidente Lagos habla de disciplina partidaria y yo quiero recordar que no fue muy disciplinado cuando siendo Ministro de Obras Públicas se opuso a la construcción de Cárcel de Alta Seguridad para miembros del régimen militar poniendo al entonces Presidente Frei en un encrucijada política. No es del caso analizar lo pertinente o no del tema, sólo expresamos que ante determinados hechos no se puede aceptar todo. La ceguera, la soberbia, la falacia y el show de la victimización nos repugnan.
Jorge Urrutia
Saludamos a nuestros amigos de Chile Primero Estación Central y les felicitamos por la claridad de ideas con respecto a este tema que es super espinudo.
Es de esperar que el Senado no se deje impresionar por los despliegues comunicacionales del oficialismo, ni tampoco por el lobby oficialista, menos aun por las presiones del Ejecutivo.
Chile tiene sus ojos puestos en los Congresistas y todos aquellos que sigan "devaneando" seguramente van a ser sancionados por un electorado que es muy paciente, pero que cobra las cuentas.
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