Jaime Guzmán...Presente.El Gobierno de Bachelet, que ya nos había demostrado claras falencias en eficiencia, capacidades, honestidad, respeto a la ciudadanía, ahora nos ha mostrado su peor faceta, la del odio irracional y permanente, su escasa estatura moral y la de la mediocridad intelectual.
Lo que no ha entendido la Gobernante, ni tampoco sus asesores políticos, es que su ausencia en la inauguración del Memorial al Asesinado Senador Jaime Guzmán Errázuriz, lejos de desmerecer al homenajeado, le concede una estatura que se quisieran los ocupantes de La Moneda.
Jaime Guzmán nunca transigió con los odios, el engaño o la manipulación de los valores, causas en los que nuestros Gobernantes son verdaderos profesionales, así como tampoco declinó en la defensa de sus ideas y sus posiciones, lo que lo llevó a ser asesinado por los amigos de quienes hoy Gobiernan.
No fue un hombre de ambiciones personales, vivía con bastante frugalidad, pero era insaciable en la lectura, el estudio, en la formación de juventudes, en la propagación de las ideas que consideraba mejores para Chile, en la defensa de su fe y en la búsqueda de la justicia social.
Era un polemista de fuste, obvio, tenia una mente privilegiada y una rapidez de pensamiento que seguramente hace palidecer de envidia a muchos de nuestros políticos, sus enseñanzas se encuentran plenamente vigentes a pesar de haber sido exterminado hace 18 años.
Nosotros tuvimos muchas diferencias con este hombre, pero su lealtad en la lucha, su consistencia en el pensamiento, la consecuencia entre lo que decía y su vida personal, simplemente le transformaban en un hombre admirable, su bondad y misericordia beatificaban su existencia.
Jaime Guzmán Errázuriz fue un lujo para Chile, lamentablemente mentes afiebradas por las odiosidades inducidas por los mismos que hoy se esfuerzan por dividirnos le quitaron la vida, impidiendo que con sus capacidades e intelecto hubiese podido sacar al país del pozo en que se encuentra.
El espíritu de Jaime Guzmán Errázuriz se encuentra en todos los que estamos enamorados de nuestro país, en todos los que queremos sacarlo del sub desarrollo, en todos los que queremos recuperar los valores de la vida, en todos los que queremos que haya real justicia en el país.
Por eso, hoy, como muchas veces lo hemos dicho, Jaime Guzmán esta más presente que nunca entre los que queremos moralizar el país, terminar con la mediocridad, acabar con la corruptela, poniéndonos a trabajar, una vez más, para volver a cambíar el rostro del país por uno más humano.
Los países que tratan de vivir sin valores
terminan por desvalorizar la vida de sus ciudadanos.
